En la CGT recibieron con algo de alivio este miércoles el anuncio del Jefe de Gabinete Manuel Adorni sobre la decisión de no incluir en el proyecto de reforma laboral la eliminación de las cuotas solidarias, una de las principales vías de financiamiento de los gremios. Era el capítulo de la norma que más irritaba a la central obrera.
Sin embargo, en Azopardo mantienen la guardia en alto. Este miércoles intentarán coordinar una estrategia conjunta con los senadores de Unión por la Patria y mañana reunirán al Consejo Directivo cegetista para definir un plan de acción frente al proyecto que se empezará a discutir en el Senado.


